El final de Arrow; la serie que nos convirtió en "algo más".

Oliver y Felicity

Hoy he tenido, por fin, la oportunidad de ver el último episodio de la serie "Arrow", el número 10 de la octava temporada. Y esta serie, más que muchas otras, merece que le dedique una despedida y unas palabras tras estos ocho años en mi vida.

Cuando vimos "Arrow" por primera vez, muchas personas conocíamos tanto a "Flecha verde" como este universo por primera vez. Nos encontramos con Stephen Amell, un actor bastante desconocido para el público en general, una atmósfera oscura que recordaba a Batman y su taciturno protagonista, y un héroe al que todavía no podíamos calificar como tal. 

Stephen Amell empezó la serie con dificultades. Si bien Oliver Queen no exigía un esfuerzo interpretativo demasiado grande, a muchas personas nos pareció que era algo más plano de lo que debería, siendo el personaje que llevaría el peso de la serie. Pero a medida que personajes tan histriónicos como el de Felicity tomaban protagonismo, el equilibrio entre el protagonista y sus secundarios estabilizó la serie. Y Amell, en pocos años, crecería como actor, con su personaje, haciendo que olvidáramos esas primeras reservas que tuvimos al conocerle. 

Imagen del capítulo final de Arrow

Los secundarios, como iba diciendo, se convirtieron en parte de la trama principal y en una necesidad que los guionistas supieron satisfacer. Desde Diggle, el incansable compañero, a Thea o Tommy, personajes que empezaron siendo muy superficiales para crecer en profundidad con la serie. Y especialmente, Laurel. Mención más que merecida para Katie Cassidy, la actriz que nos llevó en una ruleta rusa de emociones con una Laurel insoportable, ingeniua y  algo pesada, a una evolución brutal tanto de ella como de la que sería su doble en otra Tierra en las últimas temporadas. De hecho, del final de temporada destaco como conversación más esperada y bonita la que tiene Laurel con Lance, su "padre", cuando ella le confiesa que igual no se merece estar ahí, sino la Laurel original, pero Lance le deja claro que ella es para él su hija. 

Otra cosa que hay que agradecer a esta serie de ocho años es la gran cantidad de personajes que nos permitió conocer, como a Sara Lance, la hermana de Laurel, líder "Legends of tomorrow" ahora, Barry Allen (The Flash) y un largo etc. Por algo lo llamamos el "Arrowverso", es la serie en torno a la cual han nacido muchos, y muy exitosos, spin-offs que han permitido épicos crossovers anuales y una continuidad, ahora que Arrow ha cerrados sus puertas.

Thea y Roy

En su final, Oliver Queen se sacrifica ante la gran crisis del crossover de 2019/2020 para salvar a su familia, amigos y al mundo, en general. Ni siquiera Flash, Supergirl, Superman y otros con poderes sobrehumanos fueron capaces de llevar a cabo lo que llevó él con su desarrollo personal y entrega por los demás. Y, perdiéndolo a él, ganamos un mundo completo, en el que se reparan muertes injustas como la de Moira, la madre de Oliver,  o la de Tommy, su mejor amigo. Pero sobretodo, el Capitán Lance, que además tendrá a su "hija mayor" en la nueva Laurel. Un mundo con menos crimen, con reparación e inspiración para futuros héroes. 

Los guionistas han tenido el detalle de hacernos cerrar la serie con Ollie y Felicity, por fin reunidos, en el más allá, felices, juntos y jóvenes, como recompensa por todos sus sacrificios y su demasiado temprana separación en la Tierra. Las lágrimas y la nostalgia aseguradas con algunas escenas de la primera temporada, cuando Oliver la ve por primera vez (nicely done!). 

Oliver Queen, temporada 1

Fuera ya de la serie como tal, y de esta despedida, no podemos olvidar que Oliver, al morir, se convierte en un espectro. Para los entendidos de este mundo, ya saben que es el antihéroe de DC, Espectro. Esto abre la posibilidad a que regrese en algún momento, aunque solo sea de pasada. También se atisba la posibilidad, que aún no puedo confirmaros al cien por cien, del spin-off "Green Arrow and The Canaries", con las canarios y la hija de Oliver (ojalá!!!). Y no se quedan ahí las dudas. Diggle abre una caja caída del cielo, con una luz verde en su interior, que nos deja pensando si será el próximo Linterna Verde. Incluso nos presentan a Laurel y a Tommy, que parece que se llevan bastante buena impresión el uno del otro, durante el funeral de Ollie, para que  nuestra imaginación nos lleve a escenarios todavía más bonitos, mientras que Roy y Thea deciden casarse.

Como veis, ha sido un final bastante completito y a mí, por lo menos, me ha dejado muy satisfecha. ¿Os ha gustado?

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